En la mañana de hoy domingo ha quedado inaugurado el Parque del Homenaje y el Recuerdo en memoria de todas las personas del municipio que se han visto afectados por el coronavirus.
El acto ha sido abierto por el Primer Teniente de Alcalde, José Enrique París, quien ha leído la exposición de motivos de la propuesta aprobada por unanimidad en el Pleno de la Corporación Local celebrado en julio, en la que se establecía este homenaje.
Tras él, la Alcaldesa, Carlota López Esteban, ha pronunciado un discurso recordando a los que ya no están y sus allegados, pero también a todas las personas que, con su trabajo, han hecho posible que estos meses de confinamiento se hayan garantizado los servicios esenciales en San Lorenzo de El Escorial, así como a toda la población que ha seguido las indicaciones de las autoridades en todo momento. Posteriormente ha descubierto una placa «In memoriam de todos los afectados por el COVID-19 en el municipio.
El acto, al que además del Equipo de Gobierno han asistido representantes de todos los grupos municipales, ha finalizado con un minuto de silencio mientras sonaba la música del cuarteto de cuerda formado por los profesores de la Escuela Municipal de Música y Danza Maestro Alonso: Laura Salinas, violonchelo; Mar Poveda, clarinete; Myriam Molina, violín, y Miguel Ángel Moreno, flauta.
Discurso de la Alcaldesa, Carlota López Esteban:
Hoy con la inauguración de este parque del “Homenaje y el recuerdo” y el descubrimiento de esta placa conmemorativa, queremos rendir homenaje, con todo nuestro respeto y la mayor solemnidad a nuestros vecinos que han perdido su vida como consecuencia del coronavirus y a todos los fallecidos por otras causas durante la pandemia.
Transmitir a sus familiares nuestro profundo pesar y consuelo más sincero; todo nuestro afecto y el abrazo más emocionado. No están solos en su dolor; es un dolor que compartimos; su duelo es el nuestro.
Dolor y duelo en los que también todos nos reconocemos; unidos en los mismos principios universales de humanidad y de solidaridad.
Muchos de los que nos han dejado son, en muchos casos en la mayoría–, personas de edad avanzada que dedicaron sus vidas a trabajar duro para salir adelante y con una gran ilusión por alcanzar el progreso para sus hijos. Unas vidas cuya vocación de concordia nos invita siempre a la reflexión serena y al agradecimiento. Ellos forman parte, de la mejor generación de este país, una generación que miró hacia adelante, que nunca pidió nada y solo dio. A todos ellos, muchas gracias. Gracias por vuestra enseñanza, por vuestra tolerancia, por vuestro respeto, por vuestra alegría y solidaridad, por vuestra generosidad.
Otros vecinos que desgraciadamente hemos perdido eran hombres y mujeres que tenían todo un futuro por delante –tanto por hacer y por construir–, y que este virus nos ha arrebatado, dejando en sus familias un inmenso vacío en el alma, y una gran pena en toda la sociedad.
Gracias por tanto!!!
Todos ellos, todos los fallecidos, permanecerán en nuestro recuerdo. No los olvidaremos nunca. Este acto no puede reparar el dolor de muchas familias por no haber podido estar a su lado en sus últimas horas; ni mucho menos atenuar la tristeza por su ausencia; pero sí hacer justicia a su vida, a su contribución a nuestra sociedad, a su memoria.
En este acto de homenaje y recuerdo debemos también –y queremos– rendir tributo a los muchos profesionales que con su entrega están ayudándonos a sobrellevar lo mejor posible esta situación, especialmente al personal sanitario, auténtico rompeolas contra los embates del coronavirus. Pero también a tantas y tantas personas de muy diversos sectores, que en este momento están poniendo de manifiesto su verdadero valor, dando lo mejor de sí mismas para que dentro de la excepcionalidad podamos seguir desarrollando nuestras vidas en las mejores condiciones posibles.
Todas ellas son la demostración más palpable de que nuestra sociedad está llena personas excepcionales.
Sirva también este acto como homenaje a los voluntarios que han colaborado desde el primer momento, desinteresadamente y sin buscar nada a cambio, y que están realizando multitud de tareas desde el más absoluto anonimato.
Homenaje también A TODOS LOS QUE HAN VENIDO PRESTANDO SERVICIOS a Los de limpieza, desinfección da los trabajadores de mercados, supermercados, farmacias, centro de salud, trabajadores municipales, hospital, estación de autobuses, queremos públicamente expresarles nuestro reconocimiento y agradecimiento.
Hoy reconocemos conductas llenas de entrega a los demás sin reservas –aun poniendo en riesgo la propia vida–; llenas de solidaridad, de valentía, de ejemplaridad y de generosidad que nos han emocionado y que nos enorgullecen a todos.
Esas conductas no son casuales. Son fruto de convicciones personales profundas; de un hondo sentimiento de humanidad con sus semejantes; de un compromiso firme y leal con su profesión; son fruto de la responsabilidad y de la voluntad de servicio a los demás.
A esas personas les debemos mucho más de lo que podamos imaginar: han salvado muchas vidas; les debemos nuestra salud, nuestra seguridad… y los servicios más esenciales para la vida cotidiana.
Agradezco a la ciudadanía de San Lorenzo su civismo que están demostrando en estos tiempos al seguir las recomendaciones que desde las instituciones se están haciendo para poder frenar cuanto antes esta pandemia.
Muchas personas en soledad, muchas otras padeciendo la enfermedad en sus casas, y familias enteras, han asumido con gran entereza, abnegación y disciplina el confinamiento en sus domicilios, sabiendo que su actitud consciente y comprometida era fundamental –y lo sigue siendo– para combatir la pandemia.
A todos ellos, muchas gracias. Esta crisis nos ha puesto a prueba como pueblo y como sociedad, pero también nos ha permitido comprobar los principios que definen y caracterizan a miles de ciudadanos que han puesto su esfuerzo y su trabajo al servicio del bien común.
«La memoria es un deber, no vamos a olvidar a ninguno”
Que el ejemplo de todos los profesionales, voluntarios y ciudadanos nos sirva como modelo para seguir construyendo el futuro.
Y que el dolor, las lágrimas de estos días nos fortalezcan y nos lleven, con esperanza, a un futuro mejor.
En memoria y recuerdo, de todas las personas que nos han dejado y nos están dejando en estos días, ruego guardemos un minuto de silencio.
Muchas gracias.
