San Lorenzo de El Escorial celebra el primer Taller de Coordinación para abordar el maltrato infantil. Esta actividad se realiza a propuesta del programa de Familia e Infancia de la Mancomunidad y está incluida en el programa de Atención al Menor del Convenio de Atención Social Primaria, que firmó el Ayuntamiento con la Comunidad de Madrid en 2019.
El taller, que se celebra en dos sesiones, el 18 y 19 de diciembre en la Casa de la Mujer, va dirigido a profesionales de distintos ámbitos que intervienen directamente en el proceso de toma de decisiones en la detección, notificación e intervención en situaciones de desprotección infantil, como el ámbito educativo, la salud o las fuerzas de seguridad.
La convocatoria ha tenido mucho éxito, por lo que el salón de actos de la Casa de la Mujer -con aforo de 55 personas- se ha quedado corto para acoger a los profesores, orientadores, trabajadores sociales, pediatras, enfermeros, algún miembro de la Guardia Civil y de las policías locales, miembros de ONG’s, que han acudido al taller.
La finalidad de este taller es principalmente práctica: consensuar y elaborar protocolos eficaces de coordinación institucional, detección, y notificación del maltrato infantil, ya que la Mancomunidad está integrada por 10 municipios con una gran dispersión geográfica. La coordinación entre estos profesionales es complicada, ya que el área geográfica de actuación de los servicios sociales no coincide con las áreas territoriales de actuación de otros sistemas públicos: Educación, Sanidad, o Guardia Civil.
Esta dispersión supone que existan dificultades para establecer las coordinaciones y protocolos de intervención adecuados, y para sostener las estructuras que vienen obligadas por Ley, como las Comisiones de Atención a la Infancia, de difícil o casi imposible ejecución en el marco supramunicipal en el que se trabaja desde las Mancomunidades de Servicios Sociales.
En el día a día de la actividad laboral del Centro de Servicios Sociales, y más especialmente desde el Programa de Familia e Infancia, se observa que, cuando se detecta una situación de maltrato o desprotección infantil, los profesionales no actúan con un criterio unificado, no cuentan con un itinerario o protocolo integrado y eficiente acordado o consensuado, sino que, más bien, se actúa desde cada área con arreglo a sus propios protocolos, sin tener en cuenta la actuación y competencia en la materia de otros agentes sociales. Existe, evidentemente, buena voluntad, pero también se dan errores en el proceso de detección, notificación e intervención que en situaciones de este tipo pueden suponer que los menores no reciban la atención requerida, con la urgencia y los plazos más adecuados para ayudarles a reducir el riesgo y gravedad del posible maltrato sufrido. Con talleres como este se busca la eficacia en la respuesta ante estas graves situaciones que, desgraciadamente, pueden sufrir los menores de nuestra Comunidad.
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